One in a million

Las cosas de a poco se van solucionando, de a poco todo cierra, encaja perfectamente como dos piezas de rompecabezas. Me voy armando de ilusiones, de deseos, de sonrisas, de caricias, de besos y abrazos, de globos con helio, de magia y citas en heladerías.
Como mi vida es como un cuento de hadas, realmente, siempre tiene que estar la hechicera mala, el mounstro horrible que me quiere comer, o algún personaje diabólico semejante. Es como querer estar alla, donde todo esta mas tranquilo, donde no existe lo malo, o al menos por el momento. Es como quedarme acá, donde se que puedo sufrir, pero sin intentarlo no puedo saber.
Es como hacer un casting, para el perfecto actor, para el protagonista de tu historia, en este caso de tu vida. Es como saber que el tiene todo para serlo, para que las taquillas revienten, y vayan mas personas a ver la peli que a la de Los Simpsons.
Tengo al protagonista, pero es carísimo, muy caro. Es traer un actor reconocido desde otro lado, pagarle muchísimo, y no se si voy a poder gastar tanto, y por otro lado esta una versión nacional, de la cual tendría que tener mucho mas alcance, pero no.
Por lo pronto el guión ya esta listo. Los actores secundarios también. Solo falta el protagonista, el otro protagonista, porque, esta es mi historia, yo tengo que estar.